14/01/2025
Foro de Encuentros Interdisciplinares con la presencia de Paolo Benanti.
FOESSA pone cifras a la crisis poscovid: la precariedad laboral alcanza a casi dos millones de familias
600.000 familias carecen de ingresos periódicos estables
1,8 millones de hogares conviven con la brecha digital
1,4 millones de jóvenes se encuentran en riesgo de exclusión severa
El 50,3% de los inmigrantes viven en situación de exclusión social
La Fundación FOESSA ha elaborado el primer informe que analiza el impacto de la pandemia de COVID-19 en la cohesión social española. Un trabajo titulado “Evaluación de la cohesión social y consecuencias de la COVID-19 en España”, en el que han participado más de 30 investigadores de varias universidades del país.
Cáritas y la Fundación FOESSA advierten de un deterioro significativo en la situación de cientos de miles de hogares en España. La evaluación realizada alerta de un “shock” sin precedentes derivado del duro golpe que ha recibido la actividad económica y el empleo por culpa del coronavirus. El informe señala que la precariedad laboral alcanza a casi 2 millones de familias, aquellas que cuentan con un único sustento económico y que la pandemia ha desestabilizado todavía más.
La covid ha abierto la brecha de la desigualdad. En términos de renta, el trabajo de FOESSA señala que la diferencia entre la población con más y menos ingresos ha aumentado más de un 25%. “Los grandes damnificados por la COVID-19 son precisamente las personas y familias más frágiles y desfavorecidas, a quienes no ha llegado las respuestas públicas del denominado escudo social”, explicaba Natalia Peiró, secretaria general de Cáritas.
Pero el informe advierte de otras brechas que se han agravado durante la crisis sanitaria: el acceso a la tecnología se ha convertido en un nuevo factor de exclusión social. El denominado “apagón digital” afecta a casi 2 millones de familias y un 4,5% de los hogares españoles reconocen haber perdido oportunidades de mejorar su situación por culpa de sus problemas para acceder a las nuevas tecnologías.
Además, se ha intensificado la brecha de género y ha golpeado con mayor dureza a sectores “feminizados” como el comercio o la hostelería. Así, mientras que la tendencia general en hogares encabezados por hombres ha sido el descenso de la integración plena a la precaria, en hogares encabezados por mujeres ha prevalecido el descenso de la integración precaria a la exclusión.
También se ha agravado la brecha generacional. Después de la pandemia, ser joven se ha convertido en otra causa de exclusión severa y ya hay 2,7 millones de personas entre 16 y 34 años que sufren esta situación. “Hay un grupo de jóvenes que ha experimentado ya dos crisis muy importantes justo en una fase esencial de sus proyectos vitales”, comentaba Raúl Flores, coordinador del Equipo de Estudios de Cáritas y secretario técnico de FOESSA.
El estudio también pone el foco en la población inmigrante que, como es tristemente habitual, sufre especialmente la situación de crisis. Después de la covid más de la mitad de los hogares con extranjeros están en situación de exclusión social.
Después de evaluar los problemas, los expertos de FOESSA ponen sobre la mesa diferentes propuestas con las que pretenden paliar los efectos que puede dejar la crisis poscovid y que inciden en los daños estructurales que no se han resuelto tras la Gran Recesión de 2008.
Desde Cáritas se propone mantener en el tiempo las medidas excepcionales que se han tomado en materia de salud, vivienda y protección social para evitar que se cronifiquen los problemas. FOESSA piden la ampliación de la cobertura del Ingreso Mínimo Vital e implementar otras medidas redistributivas que complementen los salarios más bajos. También en relación con el mercado laboral, se estima necesario reducir la precariedad y la hiperflexibilidad en sectores que se denominaron “esenciales” durante los peores tiempos de la pandemia y que abarcan ámbitos como la limpieza, la hostelería o las labores agrícolas, entre otros. Otras propuestas apuntan a los problemas en la educación y el acceso a una vivienda, reclamando, como conclusión, un reimpulso del modelo de estado de bienestar en su conjunto.
El informe completo está disponible a través de este enlace.
Reflexión y diálogo a partir del informe
Conocidos los datos del informe, la Fundación Pablo VI acoge el jueves, 20 de enero, una jornada que servirá para reflexionar y analizar en profundidad las principales conclusiones que se pueden sacar del trabajo elaborado por FOESSA y los retos a los que se enfrenta España y el mundo.
Las jornadas, a las que se puede asistir presencialmente y de forma online, se abren con la presentación de Manuel Bretón, presidente de Cáritas Española y de la Fundación FOESSA, y serán clausuradas por Natalia Peiro, directora ejecutiva de FOESSA. A lo largo de todo el día se presentarán las diferentes vías de trabajo del informe “Evaluación de la cohesión social y consecuencias de la COVID-19 en España” con la participación de diferentes expertos que han participado en la elaboración del estudio.
Luis Ayala, de la UNED, presentará las conclusiones generales; Joseba Zalakaín, del Servicio de Información e Investigación Social, comentará el impacto de la COVID-19 desde una perspectiva territorial; Gregorio Rodríguez, de la Universidad de Alcalá, hablará de los retos a las políticas públicas y Miguel Laparra, de la Universidad pública de Navarra, de los retos a la intervención social.
Las inscripciones para asistir a las jornadas en la modalidad presencial u online se pueden realizar en este enlace.
Consulta aquí el programa completo de la presentación del informe “Evaluación de la cohesión social y consecuencias de la COVID-19 en España” de la Fundación FOESSA.
