La revolución tecnológica está abriendo múltiples posibilidades en el ámbito empresarial, sanitario, comunicativo, político, social y también en el ámbito del desarrollo. Pero también desafíos. La cuarta jornada del programa de liderazgo iberoamericano de la Fundación Pablo VI estuvo dedicada, por eso, en una primera parte, a hablar de las oportunidades de la denominada inteligencia artificial, así como de las consecuencias no deseadas de sus usos.
Richard Benjamins, Chief AI & Data Strategist de Telefónica, y miembro del Comité de Expertos del Seminario Huella Digital: ¿servidumbre o servicio? fue el encargado de impartir la ponencia en la habló de la necesidad de trabajar por el buen uso de la tecnología, que puede servir, en muchos casos, para predecir fracaso escolar, enfermedades, o para detectar delincuentes, como ha ocurrido en las técnicas de reconocimiento facial usadas por Mercadona. En todos los usos, sin embargo, es fundamental no olvidar el factor ético, por lo que cada vez entran más en juego las humanidades, la filosofía y las ciencias sociales para completar los estudios y la formación en este tipo de tecnologías.
Tras esta sesión formativa, los participantes en el programa realizaron la tradicional visita a la sede del Defensor del Pueblo, para conocer el funcionamiento de esta institución que tiene por objetivo la defensa de los derechos de los ciudadanos y el control de las administraciones en la garantía de estos derechos.
En la visita pudieron conocer también su sede histórica, en el Palacio de los Marqueses de Bermejillo, un edificio de 1913, joya arquitectónica de estilo plateresco que mantiene intactos muchos de sus elementos ornamentales.
La jornada se ha completado con una sesión dedicada al liderazgo a través del cine, con el profesor Tomás Domingo Moratalla, Profesor Titular de Antropología Filosófica en la UNED, y presidente de la Sociedad Hispánica de Antropología Filosófica.