Con la entrega de diplomas, el viernes, 24 de marzo, se dio por concluida la V edición del programa de Liderazgo Iberoamericano de la Fundación Pablo VI. Un programa nacido para promover un liderazgo humanista que sea “transformacional”, dispuesto a “poner, sin miedo, las cosas patas arriba, aunque desde el respeto institucional”.
Este es el mensaje que quiso dejarles el director general de la Fundación Pablo VI, Jesús Avezuela, en el acto de clausura. Hay miles de programas de liderazgo, sobre habilidades, sobre trabajo y gestión de equipos, sobre manejo de situaciones de crisis o promoción empresarial. Pero con éste se busca que la honestidad, la verdad, la transparencia y el servicio impregnen las acciones de transformación, con autenticidad, ética, humildad y pasión.
Los jóvenes participantes en este programa de Liderazgo, 14 en esta ocasión, venidos de Argentina, Perú, Chile, Colombia, Cuba, México, Uruguay y Bolivia han tenido la oportunidad de conocer desde dentro la organización de instituciones, empresas y organizaciones de diversa índole; han conocido perfiles profesionales del ámbito de la política, el derecho, la cultura, la economía o la filosofía; han intercambiado opiniones, experiencias y formas de ver el mundo; y, sobre todo, han reflexionado sobre cómo mejorar sus entornos. Un cambio que, como les dijo el director general de la Fundación Pablo VI, “debe hacerse desde la esperanza y no desde el shock”. Porque gobernar desde el shock “genera graves problemas”.
La ponencia de clausura, a cargo de José Carlos Bermejo, director del Centro de Humanización de la Salud de los Camilos, abordó la importancia de la escucha, del acompañamiento, de la empatía y la compasión en el líder. “Todo ser humano necesita ser escuchado” y escuchar es un arte “con un poder terapéutico”, aunque ciertamente pueda tener un precio por saturación.
El reto, para Bermejo, es cómo acompañar en un mundo de prisa. La ternura sabe de tiempos lentos. Ése es el reto para el líder que, como dijo también el Cardenal Herrera Oria, sea capaz de madurar lentamente y ejecutar con rapidez.