El instituto Pablo VI reconoce con este galardón la “fecundidad cultural del mensaje cristiano, capaz de promover un auténtico humanismo” de Mattarella.
Durante la entrega, el Papa Francisco subrayó la importancia de trabajar con responsabilidad por el bien común como el propio Pablo VI ponía siempre de manifiesto: Es necesario ir contracorriente "con respecto al clima de derrotismo y reclamación, sentir propias las necesidades de los demás".
Francisco recordó las palabras de Pablo VI. “Es necesario sentir propias las necesidades de los demás”
¿La acción política una forma de caridad?
La Sala Clementina del Palacio Apostólico fue la elegida para la entrega del premio. “El servicio es lo que hace de la acción política una forma de caridad”, afirmó Francisco durante su intervención. "Servir crea alegría y hace bien ante todo a quien sirve".
Sin embargo, el Papa señaló uno de los peligros de nuestro tiempo, la no concreción. “El servicio corre el riesgo de seguir siendo un ideal bastante abstracto sin una segunda palabra que nunca puede separarse de él: responsabilidad. La capacidad de ofrecer respuestas, basándose en el propio compromiso, sin esperar a que otros las den”. En este sentido, Francisco alabó las numerosas ocasiones en las que Mattarella había ejercido esta responsabilidad a través de sus acciones. “¡Cuántas veces, señor presidente, antes con el ejemplo que, con las palabras, ha apelado usted a ella!”. Y subrayó su "testimonio coherente y cortés de servicio y de responsabilidad”.
Francisco alabó el testimonio coherente y cortés de servicio y de responsabilidad de Sergio Mattarella
Además, el Papa recordó la importancia que San Pablo VI atribuyó a la "responsabilidad de cada uno por el mundo de todos" para crear sociedades solidarias. Su invitación, a "luchar sin resignarse ante los desequilibrios de las injusticias planetarias" y a "afrontar los desafíos climáticos".
El legado del Papa Pablo VI
Sergio Mattarella fue reelegido presidente de Italia en 2022, a pesar de haber descartado un segundo mandato, decidió aceptarlo ante la petición del Mario Draghi, primer ministro, y la mayoría de los líderes de los demás partidos.
El Instituto Pablo VI otorga este premio para subrayar el trabajo y dedicación de distintas personalidades que “con sus estudios y sus obras han contribuido al crecimiento del sentido de la religión en el mundo” y que testimonien la vitalidad del legado espiritual del Papa Montini.