Segunda jornada del programa de liderazgo iberoamericano de la Fundación Pablo VI
El pasado de Europa, su presente y su futuro ha sido el tema central de la segunda jornada del Programa de Liderazgo Iberoamericano que ha tenido como ponente principal a Leopoldo Calvo-Sotelo, jurista, experto en relaciones internacionales y Letrado Mayor del Consejo de Estado, con la lección magistral “¿Quo vadis Europa?”.
Tras un recorrido por la historia de la Unión Europea con el que Calvo-Sotelo ha tratado de poner en contexto la situación que se vive en el momento presente, marcada por un consolidado Brexit y una Europa amenazada por la guerra de Ucrania, ha querido poner en valor los esfuerzos que se están poniendo por mantener su unidad. Una unidad que pasa por el conocimiento y la admiración, como recoge el poeta belga Emile Verhaeren en el prólogo de uno de sus libros: “Europeos, ¡admiraos los unos a los otros!”
Es, precisamente, esa falta de pedagogía y autosuficiencia lo que ha llevado a una de sus principales crisis: el Brexit. Porque para Reino Unido, ha explicado el jurista, Europa “siempre se ha mostrado como un lugar peligroso” que hace sombra a su pasado glorioso; mientras que para Francia y Alemania Europa es “sinónimo de reconciliación”; y, para España “la solución a sus problemas”, ha dicho parafraseando a Ortega y Gasset: “España es el problema, Europa la solución”.
Desde el siglo XIX grandes personalidades como Jean Monnet o Robert Schuman ya insistían en la necesidad de crear una unidad política y de mercado común como base. Un esquema, ha dicho, que podría servir como modelo a América Latina, con la creación de un mercado único como primer paso para la unidad latinoamericana.
La historia fuerte de Europa y el Estado de Derecho en el que se basan los valores europeos son, en opinión de Leolpoldo Calvo-Sotelo, la garantía de su supervivencia frente a las amenazas de todo tipo, como la que está sufriendo en este momento. Para el jurista, la respuesta unánime de los países al aplicar paquetes de sanciones a Rusia y la acogida de los refugiados, es una nueva lección al mundo.
¿Cómo podemos hacer una Europa más fuerte en el futuro?, ha preguntado antes de concluir. Con liderazgos fuertes, “que pongan el foco en el proyecto europeo” y que demuestren firmeza frente a las amenazas. En este sentido, ha puesto de ejemplo a Alemania y su decisión de aumentar el presupuesto para el gasto en defensa, mostrando que, de nuevo, “vuelve a ser el primer violín” de la orquesta europea. Para finalizar, Calvo Sotelo ha llamado a los jóvenes iberoamericanos a “fijarse” en los orígenes y la unidad de esta Europa y a aplicar lo que considera un mandamiento: conocerse y “admirarse unos a otros”. Algo que también podría darse en Latinoamérica.
Tras la ponencia, los jóvenes han sido recibidos en la Secretaría General Iberoamericana, donde el responsable de fortalecimiento institucional, Alejandro Kawabata, les ha explicado el germen de las cumbres iberoamericanas, cuyo origen se remonta al año 1991, y que constituyen un espacio común iberoamericano de concertación política y de cooperación. Constituida por jefes de Estado y de Gobierno, con la participación de los Estados soberanos de América y Europa de lengua española y portuguesa, la Conferencia Iberoamericana tiene como eje central la celebración bienal (anual hasta 2014) de la Cumbre Iberoamericana, una reunión del más alto nivel político. Dicha reunión es coordinada por la Secretaría Pro Témpore (constituida por el país anfitrión de la Cumbre) de la mano con la Secretaría General Iberoamericana.
En esta visita, los participantes han podido conocer una institución que trabaja para fomentar los lazos y la cooperación entre países iberoamericanos, además de abrir Iberoamérica a los países y espacios afines lingüística y culturalmente.
Embajada de México
La jornada se ha completado con las visitas institucionales a las embajadas de Ecuador y México, donde han sido recibidos, respectivamente, por el embajador Andrés Vallejo Arcos, y jefa de Cooperación Internacional y Educación, María del Rosario Marta Peña Jaramillo.