Hoy hace una semana que la angustia sacudía toda España al ver las impresionantes imágenes de las inundaciones provocadas por la DANA en la Comunidad de Valencia y la provincia de Albacete. Los peores augurios se confirmaban a lo largo de los días siguientes con una cifra que supera ya los 200 muertos. Además de las pérdidas humanas, miles de familias lo han perdido todo: sus casas, sus negocios… todas sus pertenencias. Ahora toca ver la manera de recomponer sus vidas y volver poco a poco a su día a día.
Ayuda a través de Cáritas
La confederación de Cáritas Española y sus múltiples Cáritas diocesanas han habilitado números de cuenta para poder realizar aportaciones económicas. Son muchas familias las que necesitan nuestra ayuda. Cáritas Valencia está prestando distinto tipo de apoyo dependiendo de las distintas zonas y cómo han sido afectadas. En las zonas más accesibles como Aldaya, Benetúser, Alfafar y Sedaví, Cáritas Valencia está llevando alimentos y otros enseres como mascarillas, guantes y productos de limpieza, además de acoger a las personas más vulnerables que ya acompañaban antes de la catástrofe en los espacios de Cáritas. En las zonas más inaccesibles, están en coordinación con las autoridades locales para repartir comida y acompañar a aquellas personas que han tenido que ser realojadas en pabellones y centros sociales. Cáritas Valencia ha constituido un comité de Emergencia que se encargará de analizar la situación para trazar un programa de respuesta para ayudar a la reconstrucción a largo plazo de las zonas dañadas.
Cáritas Albacete está presente en Letur a través de su equipo parroquial, dando respuesta inmediata a las personas y familias afectadas y a disposición de las autoridades para ayudar allí donde se necesite.
La solidaridad del pueblo español ha sido una de las pocas notas positivas que se puede sacar de esta catástrofe, una solidaridad que se extenderá seguro a través de los próximos meses hasta que las familias de las zonas afectadas puedan vivir con cierta normalidad.